domingo, 1 de abril de 2012

Despedida


Estaba parada junto a un abismo el viento era tan fuerte que hacia que mi pelo chocara contra mi cara con mucha fuerza. En lo alto del cielo, sobre mí volaban unos carroñeros a la espera de que algo me sucediera. Al retroceder un paso para alejarme de allí y evitar lo que era una muerte segura, mi cuerpo comienzo a vibrar, se sacudía como si mil voltios me estuvieran electrocutando y por más que hiciera todo por detenerlo no podía. Me acerque más y más al abismo y caí. me entregue, cerré los ojos y esperé a la muerte

Me desperté exaltada. Asustada.                  
Toque debajo de mi espalda y si… ahí estaba mi móvil vibrando como loco.



-          estúpido teléfono, casi me matas de un susto.

Tenía un mensaje.



Emma: perdón por haberme ido sin avisarte.
Necesito que hablemos. Te espero en el
Lugar de siempre.
No le digas a nadie.
Te quiero.
                                A.


        -   Amelía! – me dije con sorpresa. me había olvidado por completo de ella, aunque sabia que mi inconsciente no podía dejar de pensarla. Tenia ganas de verla,que me diera explicasiones.
La extrañaba demasiado.
Sin pensarlo tomé mi campera y Salí hacia lo profundo de bosque.
Cruce el umbral de la puerta y la brisa fresca de la tarde-noche choco contra mi cuerpo. Me estremecí.
Al llegar al lugar pactado no había nada más que árboles y sombras deformadas a causa de que la noche iba callendo poco a poco.
Comencé a pensar que no había sido una buena idea ir sola, hasta que vi a Amelía salir de la profundidad del bosque, pero no estaba sola, sino que venia con un hombre de facciones gruesas y marcadas.



-          Emma! – su voz mostraba un tono de amargura y dolor
-          Amelía!

Ambas caminamos hacia donde estaba la otra y nos dimos un abrazo.


         -          ¿ A donde te habías metido? , no sabes la falta que me haces en este momento.
-          no puedo decírtelo, no insitas por favor - su rostro tenia una mueca de dolor al igual que su voz

Me dolió que ella no me lo contara, sentí como si un puñal me atravesara por la espalda otra vez…


          -      Amelia… - la llamo el chico que venia con ella. Su voz era gruesa y emanaba poder

Ella lo fulmino con la mirada

-       me quede sin tiempo, quiero que me hagas un favor.

Asentí
me susurro al oído algo que no podría repetir, aunque era algo imposible de hacer debía cumplir con mi amiga, se lo había prometido
 La abrace y ella me beso la frente.


         -        te voy a mandar un texto –me susurro

-       ¿vas a volver? –pregunte casi con desesperación.

No quería que volviera a irse.
Sin responder dio media vuelta y comenzó a correr hasta fundirse en las sombras
y simplemente desapareció.
por alguna razón supe que esa seria la ultima vez que la vería




LunaMora

No hay comentarios:

Publicar un comentario